La F 800 R sigue confiando en un propulsor bicilíndrico de 798 cc, que desarrolla 87 CV a 8.000 rpm y 86 Nm a 6.000 vueltas. Dotado de cuatro válvulas por cilindro y con refrigeración líquida, entre sus variadas virtudes hay que destacar la aceleración, las recuperaciones y el bajo consumo.
Su peso en orden de marcha bastante liviano, 199 kilos, su bastidor de aluminio y su depósito de combustible situado debajo del asiento (optimizando el centro de gravedad), garantizan ese alto dinamismo anteriormente mencionado.
Las opciones que ofrece la F 800 R son amplias, desde el ordenador de a bordo, hasta las dos alturas del asiento (esto último sin coste alguno, lo mismo que la reducción de potencia), pasando por el control de presión de neumáticos, ABS, puños calefactables, alarma antirrobo, toma de corriente adicional o intermitentes de leds blancos.
Fuente: quintamarcha.com
25/7/12
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